viernes, 6 de abril de 2007

Perro amor.

Muchacha, estoico soporté las furtivas miradas
que daban las otras a mi estampa
querian guardarme pegado en la tarjeta postal
de esos senos tan florecientes y bondadosos.
No probé de ninguno, pero de soslayo
podía observar como abrían sus corpiños para seducirme.

Si, mujer, así fue mi vida por largos años
me batía a brazo partido contra la tentación
un aura misteriosa me cubría
más bien maldición
que la atraía más que a todos
Era mi camino díficl, pero no imposible.

Daba mis pasos con tu imagen
en esta cabezita tan terca que tengo.
Para soportar las piedras que hendían
la suela de mis zapatos
Mi andar era ya de santo
mi mirar de perdido.

Las palabras ya no salían de mi boca
balbuceaba, rumiaba tus sonoros nombres
Que se conjugaban con Resistencia y Cavilación
Y ahora espero que disculpes la chochera de mi lenguaje
tan palabriado de expresiones contundentes
que necesario es decir las cosas sin pudor.

Y bueno, te ví, toda a tí en un principio
y con silencio juramenté seguirte
hasta el fin del universo
porque veía que ya te ibas
con otro, pero hombre malo
te dejaría en cualquie momento.

Si cultivaba con esmero cada semilla
desde el nacer de la primavera
tanto como el arte de la poesía
desde el nacer de mi juventud
¿por qué no iba a cultivar el amor
que nació en mí por tí?

Fuego, más cenizas que llamas
dejaba a mi paso, donde descanzaba
Ellas lo recogían como un tesoro
Y la lanzaban al aire como flores
Porque eran joyas en las cuales depositaba
susurrante la poesía sangrada en tú causa.

Y llegó ante tu sombra la mía
porque de mi lado era atardecer
y del tuyo el amanecer de la luna
La besó por todos sus bordes, tu sombra
me arrodillo, me inclino
Lloro de alegría por volver a encontrarte.

Mi lucha con el olvido,
con las bajas pasiones
Con los poderes titánicos
del mal que acecha a la humanidad
Ha sido potente, he alcanzado
la habilidad de combinar pasión con cerebro.

¿Y así me respondes?
Ignorando hasta mis gimoteos
Como fría estatua de mármol
¿te han cortado tus brazos,
cercenado tus pechos,
que no te dignas a dirigirme tú mirada?

¡Que! Toda mi perra vida
la juventud perdida
Para ni siquiera recibir los mendrugos
¿Eres acaso al belleza perfecta
que cercena con su guadaña
los corazones de los hombres?

¡Si lo hubiera sabido!
No habría hecho el rídiculo
del caballero de honor
por tan bajo precio final
Por un corazón derrotado
Por un perro amor.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Me gustó lo que escribiste, bastante llamativo y con frases agradables. Si, muy agradable.
Me gusta escribir semi-largo/semi-corto. Sintetizar las cosas es no dar todo el potencial (es fome lo plano) y alargarlas mucho-demasiado asquea. El punto es medio y los escritos están bastante cortitos, por cierto. ;D
Saludos y seguiré leyendo.

Anónimo dijo...

Por fin pude entrara tu blog. En días anteriores me salía que tu perfil no existía.
Gracias por tu visita a mi blog.
Saludos.

Unknown dijo...

Un excelente poema señor birucho, espero seguir leendo tus creaciones.

Anónimo dijo...

Feliz Domingo.
Saludos.

Anónimo dijo...

""No pretende más que morir finalmente en una zanja por amor, buen destino, cuando ya todo pierde su valor"

Me encantó...
y que bien eso de que no te avcuerdes de tu nombre original. Que en el fondo tu no lo eliges, si nó tus padres.

Saludos y suerte!

tallarin cervecero dijo...

esta rebueno.tiene una mezcla entre pineda y leo paredes.